LA CIUDAD
DE LOS MUERTOS
En la ciudad de
los muertos, donde crecen amapolas,
las mujeres tienden ropa sobre lápidas sin nombres,
los niños entre las tumbas juegan a salvar sus vidas
y se esconden de otros niños, del hambre o de escuadrones.
La ciudad de los muertos ya de mañana agoniza
y no hay quien les represente en las Naciones Unidas.
En todas las ciudades se habita un cementerio
donde se exilian los muertos.
En la ciudad de
los muertos no se para el autobús,
cuando la parca se duerma el muerto cenará sin luz.
Un muerto que tirita porque allí siempre es invierno,
te ofrece un cigarrillo, te invita a su mausoleo.
Nadie les tiene en cuenta en el plan nacional,
ni al hacer las estadísticas del Banco Mundial.
En la ciudad de los muertos talaron todos los sauces,
es terreno edificable.
La ciudad de los
muertos está rebosando vida
y óxido todas las puertas, la alambrada que lo cerca.
El latido de los muertos ha cruzado la autopista
y está acechando tu casa, quiere sentarse en tu mesa.
Los muertos tan
vivos habitarán los palacios,
las calles y ministerios, y los Fondos Monetarios.
De carne y luz de otros tiempos vistieron sus esqueletos,
cansados ya de estar muertos,
de habitar tu cementerio.
Letra y música:
Ismael Serrano