El anonimato de los actos heroicos

Por: Viviana Catalina Benítez Jiménez

Hoy, como hace quince años, Gando no representa demasiado para la mayoría de los habitantes de la Ciudad de México, más específicamente para los estudiantes de arquitectura o los arquitectos, incluso ni siquiera es evidente que se trate de un poblado ubicado a 10 600 km de distancia, en el continente Africano. Sin embargo, antes del año 2009, seguramente la información que proporcionaba internet al ingresar esa palabra en cualquier motor de búsqueda, era casi nula o limitada a los aspectos geográficos de la región. Hoy, los resultados inmediatos de la búsqueda incluyen encabezados como, Gando Primary School, Biblioteca en Gando, Secondary School with passive ventilation system, School buldings in Gando, Theacher’s Houses for Gando y sobre todo, Francis Kéré Architecture. ¿Qué cambió?
            Diébédo Francis Kéré (1965) fue el primogénito del jefe del poblado de Gando, en Burkina Faso. Trasladándose al poblado vecino, alrededor de 40km de su hogar, fue el único niño de su comunidad que tuvo la oportunidad de cursar sus estudios básicos, aún bajo un ambiente opresivo, hablando principalmente de condiciones de confort físico. Ese joven de excelencia académica fue premiado con una beca para cursar los estudios universitarios en Alemania; asistió a la Technische Universität en Berlín y obtuvo el grado de Arquitecto e Ingeniero en 1998.
Conviene analizar el panorama. Nos encontramos en una época de globalización, los medios de comunicación en ascenso reducen instantáneamente nuestra  distancia geográfica. Los países desarrollados representan para nosotros (en los países subdesarrollados) una oferta atractiva para emular “mejores” calidades de vida, para envidiar oportunidades y muchas veces para huir de ese “triste” país que nos vio nacer. En la situación social actual, en donde se presentan casi con normalidad decisiones fácilmente corruptibles no limitadas a un sector específico, se deja entrever cada vez con menor dificultad el rumbo que está tomando el ejercicio profesional de la arquitectura: en nuestro gremio, es más cómodo optar por la retórica arquitectónica . Resulta en extremo sencillo, por ejemplo, como arquitecto radicado en un país de primer mundo (siendo latinoamericano, asiático o africano), aprovechar una oferta laboral, respondiendo en primer lugar a necesidades de supervivencia, producir y ganar dinero; hacer uso del poder adquisitivo y tal vez mantenerse sólo al margen de los problemas; llevar una buena vida, incluso honesta, valiéndose del esfuerzo y logros propios. Eso haría un hombre, un arquitecto escaso de Virtud. Sin embargo, Diébédo Francis Kéré no ha sido sólo un hombre.
La vocación “heroica” del arquitecto comenzaba a hacerse evidente. Antes de terminar sus estudios, aquél estudiante de rasgos singulares, fundó la Asociación Schulbusteine für Gando (1998), con la finalidad de reunir fondos para construir una escuela en su comunidad natal, correspondiente con su proyecto de titulación. Antes de finalizar el año en que obtuvo su grado universitario, el arquitecto Kéré, con el soporte de su comunidad, comenzó la construcción de su primer edificio: la Escuela Primaria de Gando.
            A pesar de las adversidades que representaba su proyecto, Kéré no abandonó sus esfuerzos por compartir sus logros y enfocar sus conocimientos en la comunidad que simboliza su hogar. Usando su formación académica profesional, desarrolló estrategias específicas de construcción combinando técnicas y materiales tradicionales Burkinabés (como el barro), con modernos métodos ingenieriles. Para la edificación de la Escuela Primaria, Francis Kéré participó activa y cercanamente con su comunidad, demostrándoles las posibilidades y potencialidades de los beneficios a futuro. Al preguntársele en una entrevista, si aún “mira a la gente a los ojos” y todavía enseña a construir, el arquitecto ha respondido, “Y todavía pongo ladrillos si me dejan. Yo formo a la gente, pero aprendo tanto como ellos. La manera en que entiendo la arquitectura pasa por ensuciarse las manos y empujar todos juntos (…)”.
            La Escuela Primaria fue completada en el año 2001 y recibió el Aga Khan Award for Architecture por su “diseño simple y elegante usando técnicas básicas de construcción”. Si se piensa en el argumento anterior, por el cual fue galardonado este primer edificio, de nobleza innegable, resulta evidente el “tipo de lente” con que se le enfocó desde fuera. Se hace explícito el valor formal en relación a la austeridad de los materiales y técnicas empleados, sobre cualquier otro aspecto de significado más profundo. Nuevamente se vio a la arquitectura más cercana a un objeto y más alejada del símbolo social que encarna. Cabe preguntarse, ¿el reconocimiento público desvirtúa acciones heroicas como ésta? En este caso particular, parece que no.
            Ese primer reconocimiento recibido, por una parte pudo haber distorsionado en cierto grado el mensaje real que la Escuela Primaria de Gando debía haber enviado al exterior; sin embargo por otro lado, abrió puertas a más proyectos que compartían el mismo principio humanitario . Como el mismo arquitecto menciona, “La primera vez fue la más difícil. Luego un proyecto termina por abrir la puerta de otro. Ya no trabajo sólo en Gando. Ni siquiera sólo en Burkina Faso. Pero no soy un tipo que lucha solo contra el mundo. He ido construyendo una estructura de colaboradores capaz de extender una enseñanza: no se trata de hacer, sino de enseñar a hacer.” Ello refleja la forma en que Kéré ha intentado lidiar con su contexto actual. Por ejemplo, al estar consciente de que al verse desde fuera, sus proyectos se convierten en “una pieza de museo”, visualiza el lado positivo diciendo que trabajar en Europa hace que conozcan la historia de su hogar, que se vea otro mundo y se plantee si puede o no existir otras maneras de hacer las cosas.
            Tras el éxito de su primer proyecto, Francis Kéré decidió continuar actuando y afrontar mayores retos en beneficio de su comunidad. Desarrolló nuevos proyectos como la extensión de la Escuela Primaria de Gando, la Biblioteca, la Escuela Secundaria, una Vivienda para Maestros, el Centro Songtaaba para Mujeres, así como un centro de investigación de las prácticas de construcción ecológica sostenible conocido como el Atelier. Todos los proyectos mencionados, han sido financiados por su asociación. Desde la consolidación de su despacho en 2005, Kéré Architecture ha obtenido numerosos premios.
            Con las lecciones que nos ha dejado el culto al Héroe , es innegable que en la historia, y aún en nuestros días, existan héroes de la Arquitectura, verdaderos y falsos, en este caso llamados verdaderos arquitectos y falsos arquitectos. Diébédor Francis Kéré ha encarnado sin duda el papel de uno verdadero. Según Carlyle, hay dos criterios para distinguirlos: su “penetración” y su “sinceridad”. El arquitecto verdadero posee sinceridad, al no atreverse a engañar con sus diseños; claridad de pensamiento, siendo capaz de reconocer sus dudas; energía en la acción y fuerza de voluntad; pues tiene la convicción de obrar y cumplir con su deber como diseñador de lo habitable; intelecto, pues su conocimiento en ascenso moldea sus pensamientos; es capaz de estar a solas con su propia alma, pues no se olvida de su humanidad; y reconoce la realidad de las cosas, pero no se deja absorber por el mundo material.
Finalmente, el reconocimiento público que ha recibido la labor de nuestro arquitecto no ha sido dañino por sí mismo (pudiendo haberlo sido las acciones posteriores en sus manos); sino parece que las virtudes reflejadas en su voluntad se han incrementado y reforzado. No es importante que el nombre de Diébédor Francis Kéré siga sin significar mucho para los arquitectos y estudiantes de arquitectura de diversas partes del mundo; el Arquitecto de Gando no sólo es un verdadero hombre histórico de la arquitectura, aún sin ganar el Pritzker, siempre será el gran hombre que decidió no olvidar a sus hermanos.

Ciudad de México, septiembre 2016.

Viviana Catalina Benítez Jiménez

vicabeji@gmail.com

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
CASSIRER, Ernst. El Mito del Estado. Fondo de Cultura Económica, S.A. de C.V., México, 1946

REFERENCIAS ELECTRÓNICAS
Kere Architecture. Biography. (s.f.) Recuperado el 27 de septiembre de 2016 en: http://www.kere-architecture.com/about/
____. Primary School / Gando / Burkina Faso(s.f.) Recuperado el 27 de septiembre de 2016 en: http://www.kere-architecture.com/projects/primary-school-gando/
ZABALBEASCOA, Anatxu,  Francis Kéré: “La arquitectura es ensuciarse y empujar todos juntos”, entrevista publicada en El País el 25 de septiembre de 2015. Recuperado el 26 de septiembre de 2016 en:  http://elpais.com/elpais/2015/09/22/eps/1442916465_285411.html

NOTAS